Después de cuatro horas de sesión, el Consejo Nacional de Educación decidió nombrar una comisión para que se encargue de reabrir la investigación y determinar si los 835 estudiantes acusados de fraude en las pruebas nacionales son realmente culpables.
La decisión la anunció el titular de Educación, Melanio Paredes, luego de escuchar los argumentos de una comisión de padres y alumnos afectados que exigen que se les presenten las pruebas del delito que se les imputa.
La comisión la coordina fray Carlos Morales y la integran funcionarios de la cartera, el presidente de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) Radhamés Camacho, el rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Franklin García Fermín, y otros.
La comisión deberá rendir un informe la próxima semana, pero Paredes se adelantó y exhortó a los padres, alumnos y a los medios de comunicación considerar los resultados de la investigación.
Informó que adoptaron la decisión, porque entendieron la magnitud del problema, aunque insistió en que algunas de sus pruebas son físicamente evidenciables y otras son inferidas, por el delito electrónico.
Antes de la decisión, los representantes de los estudiantes se retiraron alegando que las autoridades sólo les habían dado una cátedra de moralidad. Advirtieron que si no se resuelve sus reclamos, no les dejarán otra alternativa que verse en los tribunales.
